Las hemorroides son cojinetes de tejidos
vasculares que se encuentran en la submucosa del conducto anal de manera
normal. La localización de dichos tejidos vasculares por lo general son lateral
izquierdo, anterior derecho y posterior derecho en la circunferencia del
conducto anal, dicho tejidos tienen como función ayudar con la continencia anal
y ayudar al cierre completo del conducto anal en reposo.
Por otra parte, se considera enfermedad
hemorroidal a las dilataciones venosas de estos cojinetes vasculares (plexos
hemorroidales) presentes en el conducto anal; las dilataciones de estos plexos
hemorroidales pueden ser internas o externas dependiendo si protruye proximal o
distal a la línea dentada o pectínea.
Las hemorroides internas corresponden al
plexo hemorroidal interno el cual se encuentra en la submucosa por encima de la
línea dentada o pectínea.
Las hemorroides externas corresponden al
plexo hemorroidal externo el cual se encuentra ubicado el plano subcutáneo
(anodermo) por debajo de la línea dentada o pectínea, por lo general podemos
encontrarlo por el margen anal.
Mientras las hemorroides se encuentren
en condiciones normales en los seres humanos estas no suelen acarrear
molestias; no obstante, una vez se tornan patológicas estas comienzan a presentar
una serie de signos y síntomas que conllevan al paciente a quejarse sobre
estas. Dicho de esta manera la enfermedad hemorroidal es una serie de
signos y síntomas que se presentan una vez existe alguna
alteración en los plexos hemorroidales internos o externos.
EPIDEMIOLOGÍA:
La enfermedad hemorroidal suele ser la
patología más frecuente de las patologías anorrectales presentando en
aproximadamente un 5% de la población mundial síntomas relacionados con esta y
la prevalencia es de alrededor del 50% a partir de los 50 años.
En niños y adolescentes jóvenes es muy
raro encontrar la presencia de disconfort relacionado con la presencia de la
enfermedad hemorroidal; no obstante, es más frecuentes en mujeres multíparas.
CAUSAS DE ENFERMEDAD HEMORROIDAL:
La enfermedad hemorroidal va a ser desencadenada o producida por cualquier factor que causa aumento de la presión abdominal, de la presión endoanal o trastornos en el retorno venoso en personas con predisposición a la formación de esta. A continuación, se mencionan posibles causas de predisposición a la aparición de enfermedad hemorroidal.
CAUSAS DE ENFERMEDAD HEMORROIDAL:
La enfermedad hemorroidal va a ser desencadenada o producida por cualquier factor que causa aumento de la presión abdominal, de la presión endoanal o trastornos en el retorno venoso en personas con predisposición a la formación de esta. A continuación, se mencionan posibles causas de predisposición a la aparición de enfermedad hemorroidal.
- Sedentarismo.
- Obesidad.
- Bipedestación prolongada (estar de pies).
- Constipación o estreñimiento.
- Diarrea crónica.
- Excesos de alcohol, café o especias.
- Conducción, equitación, ciclismo, etc.
(actividades que prolonguen estar sentado).
- Estrés.
PATOGENIA:
El mecanismo más frecuentemente implicado en la enfermedad hemorroidal es el aumento de la presión intraabdominal y endoanal, lo cual dificulta el retorno venoso provocando deslizamiento o protrusión hacia afuera en el ano del tejido hemorroidal como respuesta al aumento de la presión intraabdominal; cuando esto se instaura de manera crónica y repetitiva por los factores predisponente se produce una debilidad del tejido de sostén de dicho tejido hemorroidal hasta provocar que estas se mantengan protruidas todo el tiempo y conllevando a la formación de coágulos en la luz del tejido hemorroidal por estasis venoso y posteriormente isquemia.
CLASIFICACIÓN:
La enfermedad hemorroidal se clasifica en 4 grados los cuales se comentan a continuación:
El mecanismo más frecuentemente implicado en la enfermedad hemorroidal es el aumento de la presión intraabdominal y endoanal, lo cual dificulta el retorno venoso provocando deslizamiento o protrusión hacia afuera en el ano del tejido hemorroidal como respuesta al aumento de la presión intraabdominal; cuando esto se instaura de manera crónica y repetitiva por los factores predisponente se produce una debilidad del tejido de sostén de dicho tejido hemorroidal hasta provocar que estas se mantengan protruidas todo el tiempo y conllevando a la formación de coágulos en la luz del tejido hemorroidal por estasis venoso y posteriormente isquemia.
CLASIFICACIÓN:
La enfermedad hemorroidal se clasifica en 4 grados los cuales se comentan a continuación:
- Primer grado: Protruyen a la luz anal, pero no prolapsan
hacia fuera.
- Segundo grado: Prolapsan hacia afuera con la defecación o
pujo excesivo, pero al terminar el esfuerzo se reducen espontáneamente.
- Tercer grado: Prolapsan fácilmente, pero no reducen
espontáneamente por lo que deben de ser reducidas manualmente.
- Cuarto grado: Prolapso hemorroidal permanente, no se
pueden reducir.
Las hemorroides de primer grado suelen acompañarse de sangrado pero se caracterizan por ser indoloras o presentar escaso dolor, el dolor suele ser proporcional al grado de la hemorroides o a presencia de trombos (a mayor grado mayor dolor) así como los datos de sangrado.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS:
Las manifestaciones clínicas más frecuente de la enfermedad hemorroidal son:
- Sangrado rectal (por lo general se acompaña con
episodios de evacuaciones forzosas).
- Dolor anal con las evacuaciones (por lo general
en grados avanzados o asociadas con hemorroides trombosadas).
- Pesadez anorrectal.
- Tumefacción a masa palpable en el borde anal.
- Prurito anal (ocasionalmente).
DIAGNÓSTICO:
Se sospecha de enfermedad hemorroidal en pacientes que cumplan las condiciones previamente mencionadas. (factores de riesgos o desencadenantes y manifestaciones clínicas); no obstante, estos pacientes se pueden diagnosticar de manera incidental con la evaluación rutinaria al examen físico o a través de una anoscopia o una rectosigmoidoscopia.
TRATAMIENTO:
El tratamiento de la enfermedad hemorroidal puede clasificarse en un tratamiento clínico (inicial) o quirúrgico. Ambos tratamientos se describen a continuación:
Clínico:
- Regulación de dieta (evitar dietas astringentes,
aumentar ingesta de líquidos, agregar alimentos con alto contenido de
fibras y/o evitar diarreas).
- Evitar el esfuerzo prolongado o excesivo con la
defecación.
- Cambios de hábitos desencadenantes (ejemplo:
Sedentarismo, ejercicios o actividades que conllevan mucho esfuerzo).
- Baños de asiento.
- Analgésicos y/o antinflamatorios.
- Medicamentos venoconstrictores.
- Pomadas tópicas con corticoides o anestésicos.
Quirúrgico:
- Ligadura con bandas elásticas.
- Escleroterapia.
- Crioterapia.
- Fotocoagulación infrarroja.
- Hemorroidectomía (abierta o cerrada).
- Hemorroidopexia con grapas.
- A través de dispositivos (ultrasonidos, alta
energía).
Los procedimientos quirúrgicos por lo general están indicados en hemorroides grado 3 y 4 o tras fracaso de manejo clínico; no obstante a pesar de que se realice el procedimiento quirúrgico las medidas clínicas están siempre recomendadas.
La elección del procedimiento quirúrgico va a depender de la condición del paciente, grado de la enfermedad hemorroidal, fracaso de procedimiento quirúrgico previo y de las consideraciones del cirujano; no obstante dentro de los diversos procedimientos quirúrgicos mencionados algunos suelen ser procedimientos preferidos por guías y otros pueden estar en desuso o ser realizados con menos frecuencia.
COMPLICACIONES:
Las posibles complicaciones que se pueden presentar va a depender del tipo de manejo que optado para el manejo de la enfermedad hemorroidal, pero algunos de los que se pueden encontrar se mencionan continuación:
- Retención urinaria.
- Hemorragia.
- Dolor.
- Estenosis anal.
- Impactación del bolo fecal.
- Infección.
- Plicomas sintomáticos.
- Fisura anal.
- Recidiva.
- Incontinencia.
- Ectropión.
- Fístula anal.
Al momento de presentar síntomas de enfermedad hemorroidal lo ideal es que este sea visto por un personal de salud capacitado y que con la correcta evaluación se descarte otras posibles causas de sintomatologías relacionada con la enfermedad hemorroidal ya que el síntoma predominante de la enfermedad hemorroidal (sangrado) puede ser asociado con la presentación de otras patologías como por ejemplo cánceres, sangrados gastrointestinales etc. Por lo que recomendamos que ante la presencia de síntomas acudir al centro de salud más cercano.
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